Un trasplante de corazón era la única opción para Miranda, quien, desde los 7 años de edad fue diagnosticada con miocardiopatía dilatada, una enfermedad crónica y degenerativa del corazón que impide que éste tenga la capacidad suficiente para bombear sangre y hacer llegar adecuadamente oxígeno y nutrientes al resto de los órganos, lo cual afectaba de manera significativa su calidad de vida.
“Me empezó a doler mucho la cabeza, normalmente también el estómago. Vomitaba, despertaba por las noches con mucho dolor”, recuerda Miranda. Fue entonces cuando un médico les comentó: “Hay que ver el corazón”.
Gracias al programa de trasplantes de CHRISTUS MUGUERZA, Miranda Niño, de tan solo 11 años, se convirtió en el primer caso de trasplante de corazón pediátrico dentro del sistema de salud privado en Nuevo León.
El Dr. José Benito Cabello, coordinador del Programa de Trasplante Infantil de CHRISTUS MUGUERZA, fue quien comenzó su tratamiento y seguimiento médico. “Miranda es una paciente que acude conmigo por una enfermedad del corazón que se llama miocardiopatía dilatada, en el cual el corazón aumenta más de tamaño de lo que normalmente debe de estar”, explicó.
El corazón de Miranda fue tratado hasta el punto límite con medicamentos orales. Sin embargo, con el paso del tiempo y ante la falta de mejoría, se tomó la decisión de iniciar el protocolo para trasplante.
Un nuevo corazón para Miranda
El 26 de septiembre, a las 3:04 a.m., llegó la noticia tan esperada: había un corazón disponible. “Le di el visto bueno, era un órgano adecuado para ella”, explicó el Dr. Cabello “Se activó el protocolo de nuestro grupo de trasplante cardiaco pediátrico y entonces, todo el equipo, cirujanos, anestesiólogos, perfusionistas, infectólogos, enfermería, se activó. Todos estaban enterados de que había disponible un corazón y nos quedamos de ver aquí en el hospital”.
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Trabajo en equipo, grandes resultados
El trabajo conjunto entre instituciones, médicos, personal de enfermería y Colaboradores hizo posible trasladar el órgano hasta la ciudad de Monterrey. Durante la cirugía, todo marchó de forma favorable. “Durante todo el tiempo, la cirugía, todo fueron buenas noticias, el corazón quedó muy bien, el corazón empezó a funcionar perfectamente”, relató la madre de Miranda.
La madre de Miranda, aunque con miedo, nunca perdió la esperanza. “El doctor Benito Cabello siempre me ha dicho: confíe, todo va a estar bien. Esas eran las frases que él nos decía siempre, y lo hicimos y sí dio el resultado. Confiamos en él, confiamos en Dios, confiamos en todo el equipo médico, confiamos en el hospital”, compartió la madre de Miranda.
Latidos de esperanza
Con una valla de aplausos, felicitaciones y palabras de aliento por parte del personal médico y de enfermería, Miranda se despidió de CHRISTUS MUGUERZA Hospital Alta Especialidad con una nueva oportunidad de vida que le permitirá continuar compartiendo amor con su familia.
“Todo lo que ella pueda necesitar, el hospital lo tiene”, señaló su madre.
Hoy, después de algunos años de su trasplante, Miranda también alza la voz con gratitud: “Pues yo le diría que muchísimas gracias por donar, porque con esos órganos se pueden salvar muchas vidas. Por ejemplo, a mí, pues, me salvó el nuevo corazón y pues agradecerles muchísimo”.
El programa de trasplantes de órganos de CHRISTUS MUGUERZA está conformado por una red de médicos expertos, enfermeros especializados y equipos tecnológicos de vanguardia que permiten proveer diagnósticos, tratamientos eficientes y una atención médica integral altamente humana.
