Hace seis años, el ritmo de vida de Marali y su deseo por ser mamá nuevamente, tuvieron que detenerse cuando detectó una bolita en uno de sus senos mientras jugaba con su hijo mayor, Rodrigo.
“Mi vida era muy acelerada porque estaba concentrada en crecer laboralmente y en planear un segundo embarazo, el cual tuvo que detenerse. En un momento que estaba jugando con mi bebé me pateó, me toqué y me sentí una bolita”, recuerda Marali.
La detección temprana, clave en el proceso
Marali se realizó estudios médicos en su ciudad de origen, Reynosa, Tamaulipas, y su doctor le detectó un fibroadenoma, un tumor mamario que generalmente es benigno, por lo que decidió retirárselo antes de embarazarse de nuevo. Sin embargo, las cosas cambiaron cuando los análisis postoperatorios apuntaron a que se trataba de un tumor maligno.
Atención integral que transforma vidas
En medio de la angustia e incertidumbre, Marali encontró al Dr. Homero Lozano, Cirujano Especialista en cáncer de mama de CHRISTUS MUGUERZA Hospital Sur , durante su búsqueda, mencionando que recibió una atención cálida y profesional.
“Desde el momento que llegué con él como que se hizo un clic de paciente y doctor, sentí mucha confianza y sentí que estaba en las mejores manos. De ahí, empezamos todos los estudios para ver el tipo de tratamiento y cirugía que íbamos a realizar”, comentó Marali.
El Dr. Homero Lozano, cirujano mastólogo, guio a Marali durante todo el proceso, presentándole las opciones adecuadas para su tratamiento de acuerdo con su valoración, por lo que ambos optaron por remover las glándulas mamarias y reconstruirlas de forma inmediata con apoyo de un equipo médico especializado de CHRISTUS MUGUERZA Hospital Sur.
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Cuando la fe se convierte en recompensa
Marali confesó que se sentía aterrada por los procedimientos, pero dentro de ella existía un impulso que le daba fortaleza para enfrentar la circunstancia: su primer hijo y la voluntad de ser madre de nuevo.
“Mi primer hijo fue mi razón, mi motivación para seguir adelante con esto y mi bebé que ahora tiene diez meses es la recompensa de toda esta lucha”, asegura.
Además, destacó que su red de apoyo conformada por su esposo, sus amigas, sus tías y sus papás, fue indispensable para superar la situación y no sentirse sola durante el proceso, por lo que agradece el acompañamiento que le brindaron en momentos difíciles.
“Estoy agradecida con mis papás que estuvieron conmigo, mi esposo, mi hijo Rodri, mis amigas que estuvieron siempre al pendiente y me animaban en cada estudio o revisión, mis tías, pero sobre todo mi mamá, que siempre estuvo ahí, iba y me daba de comer y siempre estuvo al pendiente de todo lo que yo necesitaba”, comentó Marali.
Un hospital que marcó la diferencia
Después de cinco años de tratamientos, Marali no se rindió y hoy vive libre de cáncer gracias a un seguimiento oportuno. Su experiencia la inspira a enviar un mensaje a las mujeres, en especial aquellas que están empezando a recibir su tratamiento:
“A todas las personas que conozco les digo que siempre hagan sus revisiones, que se chequen porque esto es algo que es silencioso y que no se siente. A las personas que apenas van a iniciar, recuerdo que yo también tenía mucho miedo, pero con fe de seguir adelante, en base a mi experiencia yo les diría que esto va a pasar y que van a estar bien”.
Desde 2024, CHRISTUS MUGUERZA Hospital Sur cuenta con una clínica especializada en prevención, diagnóstico y tratamiento de cáncer de mama, un espacio dedicado a la salud integral de las mujeres que ofrece atención médica de calidad con un enfoque humano. Si deseas conocer más sobre nuestros servicios, da clic y visita nuestro sitio web aquí.
