Todos los días llegan al mundo bebés antes de lo previsto enfrentando una batalla que requiere la máxima especialización y el más profundo humanismo para su cuidado. Según la Organización Panamericana de la Salud, en el continente americano, cerca de 1 de cada 10 nacimientos ocurren de forma prematura.
Para hacer visible esta situación, cada 17 de noviembre se conmemora el Día de la Prematuridad, una fecha para reconocer los desafíos que enfrentan los bebés nacidos antes de tiempo y la importancia de ofrecerles atención neonatal de calidad.
En CHRISTUS MUGUERZA la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) se convierte en el primer hogar de estos pequeños guerreros y en el lugar donde vivirán sus primeras luchas. Aquí, la tecnología de vanguardia y la vocación de un equipo multidisciplinario se unen para ofrecer una esperanza de vida a quienes más la necesitan.
Nacidos para vencer
Los bebés prematuros llegan a la vida con un desafío inesperado y sus historias son ejemplo de resiliencia y dedicación de sus familias.
El caso de Saanvi es un claro ejemplo. Llegó al mundo el 10 de junio con tan solo 27 semanas y un peso de 1.252 kg. Saanvi sufrió un paro cardiorrespiratorio por prematurez extrema. Su batalla inicial fue ardua, pero su familia y los cuidados especializados en la UCIN la rodearon de fuerza para salir adelante. Después de 69 días de lucha, Saanvi egresó del hospital demostrando que la fortaleza se lleva en el corazón.
Luan tiene también una historia de lucha y fuerza que contar. Nació pesando apenas 1.040 kg y durante 55 días en la UCIN, superó cada obstáculo con una fuerza admirable. Hoy, Luan se en casa con su familia, con un peso de 1.870 kg. Un peso que refleja su recuperación y crecimiento constante tras semanas de cuidado especializado. Hoy su historia nos sigue inspirando a todo el equipo que estuvo entregado a su cuidado.
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Tecnología de vanguardia y cuidado multidisciplinario
En CHRISTUS MUGUERZA, la atención al neonato de alto riesgo se basa en un modelo integral. Dentro de las Unidades de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), los bebés prematuros se ven cobijados en un entorno con infraestructura y tecnología que les permite tener un soporte vital avanzado y monitoreo continuo; así como un equipo médico y de enfermería listo para atender la complejidad que cada caso exige.
La historia de Ana Lucía comenzó un 7 de enero, nació de manera prematura enfrentando una dificultad respiratoria severa con diagnóstico de neumonía intrauterina y una malformación congénita llamada fístula traqueoesofágica, una condición que provoca insuficiencia respiratoria severa en el bebé y la necesidad de soporte ventilatorio inmediato. Su recuperación duró 52 días y fue posible gracias a la perfecta coordinación de este equipo multidisciplinario, la capacidad resolutiva y tecnología que demuestran el nivel de especialización disponible en nuestro sistema de salud.
La graduación
El egreso de la UCIN no es una simple despedida, es una celebración para todos. Este preciso momento representa el final de semanas de esfuerzo y la recompensa a la fe y la perseverancia de las familias de los bebés prematuros.
Emiliano es una de esas historias de victoria. Tras pasar 38 días en la UCIN, logró aumentar de 1.400 kg a 2.075 kg, permitiéndole ir a casa listo para seguir creciendo en el calor de su hogar.
Mía Valeria es otro testimonio de lucha extrema. Nació pesando tan solo 780 gramos y logró aumentar su peso a 2.015 kg, demostrando a todos que la verdadera fuerza no se mide por el tamaño del cuerpo.
Para Santiago, nacido a las 28 semanas de gestación y con un peso de 1.360 kg, su esfuerzo fue mayúsculo. Después de 52 días de lucha, se fue a casa al conseguir un peso de 2.020 kg, llenando de orgullo y emoción a todo el equipo encargado de su cuidado y a su familia.
Vocación y humanismo: el corazón de la enfermería neonatal
El cuidado del prematuro combina a la perfección la técnica especializada y la atención con amor. El equipo de enfermería de la UCIN es reconocido por su vocación y empatía, siendo el principal puente entre el bebé y sus padres, y su principal apoyo durante sus primeros días en el mundo.
El testimonio de las madres de bebés prematuros atendidos en la UCIN de CHRISTUS MUGUERZA Hospital Saltillo lo demuestra:
“Nuestra bebé estuvo internada en cuidados intensivos desde que nació… nos preocupamos mucho porque no estaba con nosotros; el día que nos tocó visitarla por la mañana, nos atendió la enfermera Graciela. Ella nos explicó muy amable cómo estaba mi niña, nos ayudó a saber cómo cargarla porque nos daba miedo con tantas conexiones que tenía, pero ella nos dio la confianza. Graciela es paciente, dedicada y humana, empática con los bebés y papás y te hace sentir más ligera la carga, ¡gracias!”.
Un compromiso desde el primer latido
Las historias de Santiago, Saanvi, Emiliano, Mia Valeria, Luan y Ana Lucía reafirman el compromiso de CHRISTUS MUGUERZA con la atención integral y humanizada.
En la UCIN, la esperanza se cultiva diariamente, demostrando que, al unir la tecnología de vanguardia, el conocimiento médico especializado y el amor incondicional del personal de enfermería, es posible transformar historias complejas en triunfos de vida, desde el primer y más frágil latido.


