El Parkinson suele afectar tanto a hombres como a mujeres. Tiene la particularidad de ser una enfermedad neurodegenerativa, es decir, afecta varias actividades que el cuerpo realiza, como el equilibrio, movimiento, el habla, respirar y funciones del corazón, pero ¿en qué consiste esta enfermedad? A continuación te lo explicamos:
Las neuronas de una persona con Parkinson comienzan a morir, lo que ocasiona una deficiencia de dopamina en el cerebro, una hormona que se encarga de controlar el movimiento y la coordinación. Conforme el Parkinson avanza, la persona afectada tendrá cada vez menos control de sus movimientos y tendrá más dificultades para caminar, hablar o hacer otras tareas sencillas.
“El Parkinson afecta a personas de 50 años o más, a veces los síntomas pueden presentarse antes.”
Síntomas
Los síntomas de la enfermedad de Parkinson aparecen de forma gradual y no todos los experimentan en mismo grado o número. Los cuatro síntomas principales son:
- Temblores en las manos, brazos, piernas o mandíbula.
- Rigidez muscular en las extremidades o el torso.
- Lentitud de movimiento (bradicinesia).
- Inestabilidad en la postura (dificultad para coordinar y balance).
Estos síntomas pueden ir acompañados de uno o más de los siguientes:
- Depresión
- Cambios emocionales
- Dificultad para tragar, masticar o hablar
- Incontinencia urinaria o constipación
- Problemas para dormir
- Fatiga
- Problemas en la piel
- Demencia o confusión
Diagnóstico
No se conocen las causas exactas de la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, algunos indicadores genéticos ayudan a identificar si alguien lo padecerá en un futuro, por lo que los doctores usualmente realizan un diagnóstico basado en un examen neurológico y en la historia clínica del paciente y de su familia.
A veces se pide que se realicen estudios adicionales para descartar otras enfermedades. El doctor que realiza el diagnóstico debe ser un neurólogo experimentado, de preferencia especialista en padecimientos del sistema motor, debido a la dificultad del diagnóstico.
Tratamiento
Todavía no se ha encontrado una cura para el Parkinson, aunque sí existe tratamiento efectivo para lidiar con los síntomas. Por lo general se receta un fármaco que las células del cerebro pueden utilizar para recuperar los niveles normales de dopamina y reducir la lentitud de movimiento y la rigidez muscular.
Otros síntomas pueden ser tratados con diferentes fármacos que el doctor recetará según el paciente. En casos severos, se puede recurrir a la cirugía cerebral; el asesoramiento del doctor resulta indispensable para determinar si es necesario o no.
Prognósis
Aunque no haya una cura, algunas personas puede continuar su vida plenamente si se administran los cuidados apropiados. Por ello es importante no ignorar los síntomas y acudir al médico especialista lo más pronto posible para poder tratar la enfermedad de manera satisfactoria.
Recuerda que la información es tu mejor arma para prevenir enfermedades, comparte este artículo con quienes más quieres y juntos formemos una sociedad mejor informada a cerca del Parkinson.
