Seguramente en más de una ocasión, después de comer, has sentido que tu cuerpo se vuelve pesado y que el sueño comienza a invadirte. Esta condición se denomina marea alcalina postprandial, mejor conocida como el mal del puerco. La marea alcalina postprandial, mejor conocida como el mal del puerco, se debe a una baja energética ocasionada por un exceso en la producción de bicarbonato en la sangre, el cual necesita sintetizarse en respuesta a la producción de ácido clorhídrico que el estómago realiza cuando nos alimentamos. Cabe destacar que para la producción de bicarbonato tiene que haber un intercambio de electrolitos de la sangre a las células del estómago, es en este intercambio cuando los niveles de bicarbonato aumentan y por ende ocurre la marea alcalina, es decir, el mal del puerco. El mal del puerco tiende a presentarse minutos después haber comido y puede durar algunos minutos e, incluso, hasta dos horas. En este lapso de tiempo la persona se siente cansada y con una fuerte sensación de pesadez y somnolencia.
¿Cómo evitar el mal del puerco?
El mal del puerco está condicionado por la cantidad y calidad de los alimentos, por lo que se recomienda:
- No saltarse el desayuno.
- Evitar comer en grandes porciones.
- Evitar alimentos con un alto contenido de azúcar.
- Evitar comidas muy grasosas, como alimentos fritos o empanizados y en su lugar consumir aquellos que estén cocinados al vapor o a la plancha.
- Durante la comida es mejor consumir más verduras que proteínas.
- Comer sin prisas, ya que si se come muy rápido la digestión será más lenta.
- Beber abundante agua natural durante el día.
- Comer poco y varias veces durante el día.
Y si ya me dio el mal del puerco ¿cómo le hago para contrarrestarlo?
Si, después de la comida, la somnolencia y el cansancio te invaden, te recomendamos lo siguiente:
- Mantente ocupado después de la hora de comida, prueba con realizar un poco de actividad física. Por ejemplo, si puedes, sal a caminar por espacio de 10 a 15 minutos antes de regresar a tus actividades.
- Tomar un café americano para mantenerte despierto.
- Bebe una taza de té de manzanilla o anís para ayudar en el proceso de la digestión.
- Asoléate, esto te ayudará a que tu cuerpo produzca naturalmente vitamina D, la cual reduce la producción de melatonina, hormona que produce sueño.
Ahora ya los sabes, come de una manera saludable y en pocas cantidades para reincorporarte a tus actividades después de la hora de comida sin tener pesadez y cansancio. Comparte esta información con amigos y familiares y juntos combatan al mal del puerco.