Las personas que están en riesgo de hacerse daño a sí mismos o a los demás generalmente dan señales antes de realizar un acto violento. Sin embargo, cuando no sabemos a qué signos prestar atención es posible pasarlos por alto o creer que no son importantes, algunas veces con consecuencias que lamentar.
Es importante saber que un signo de alerta por sí solo no significa que una persona está planeando un acto de violencia. Sin embargo, cuando muchos signos se conectan o comienzan a acumularse durante un periodo determinado de tiempo, puede significar que la persona podría estar planeando un acto de violencia en su contra o de los demás.
Conocer estas señales puede ayudarte a intervenir y brindar ayuda a la persona, e incluso salvar vidas. Algunos signos de alerta son:
- Una fuerte fascinación u obsesión con las armas.
- Estudio excesivo de armas de fuego o actos de violencia pueden significar que la persona está planeando un acto de violencia.
- Mostrar reacciones exageradas o comportamiento agresivo por razones menores puede significar que la persona no puede autorregular sus emociones o controlar su ira.
- Gestos de violencia y bajo compromiso o aspiraciones en la escuela, o un cambio repentino en el rendimiento escolar puede significar que la persona necesita ayuda.
- Las personas que realizan actos de violencia a sí mismos o contra los demás pueden ser víctimas de mucho tiempo de bullying y tener sentimientos, reales o percibidos, de persecución.
- Sentimientos extremos de aislamiento o alejamiento social debido a acciones, reales o percibidas, de otros que pueden orillarlos a alejarse de los demás.
- Acceso no supervisado, ilegal y/o fácil acceso a armas de fuego, o alardear acerca de armas de fuego puede ser una señal de alerta.
- Realizar amenazas de violencia, ya sea de manera escrita, hablada, en fotografías o videos en redes sociales realizando gestos que hagan alusión a violencia o el uso de armas, son señales que no deben de ser ignoradas.
Si observas demasiadas señales de alerta o una amenaza real, es necesario que tomes acciones inmediatas como reportar el caso a la policía, a las autoridades de la escuela de tu hijo o a un profesional en Salud mental. Si detectas un posible acto de violencia, llama inmediatamente a la línea de emergencia 911.
Si bien existen muchos signos de alerta posibles, a continuación te mostramos los que aparecen con mayor regularidad en personas que han cometido actos de violencia contra sí mismos o los demás:
Ser muy agresivo y/o tener falta de autocontrol
- Ausencia de habilidades de manejo de la ira o resolución de problemas.
- Realizar amenazas de violencia en fotografías, videos, de manera hablada o escrito.
- Delinquir con regularidad, especialmente a edades pequeñas (menores de 10 años)
- Patrones de conducta impulsiva o golpear cosas de manera regular.
- Presentar conductas de intimidación o bullying con regularidad.
Aislamiento social crónico
- Ser víctima constante de rechazo social o ser marginado.
- Repentino alejamiento de personas o actividades que antes disfrutaba realizar.
- Culpar a otros de sus propios fracasos.
Comportamiento retador
- Cargar con armas en la escuela.
- Alardear acerca de realizar un futuro acto de violencia.
- Reclutar a gente para unirse a su ataque.
- Alertar a algún amigo de mantenerse lejos de la escuela o de algún otro lugar.
Enfermedades mentales o cambios de comportamiento
- Enfermedades mentales diagnosticadas o sin ser diagnosticadas (pueden contribuir a actos de violencia contra sí mismo)
- Intentos previos de suicidio, ideas suicidas o de realizarse daño a sí mismo.
- Cambios importantes en hábitos alimenticios o de sueño.
- Sentimientos de desesperanza, culpa o baja autoestima.
- Mostrar bajo desempeño escolar y actividades extracurriculares.
- Ideas homicidas
- Cambios significativos en la personalidad
- Cambios importantes en su apariencia física
- Comenzar a regalar cosas personales a los demás
- Traumas de experiencias difíciles en la niñez.
Comportamiento antisocial
- Malos ejemplos a seguir o grupos negativos de amigos.
- Pensamientos de hostilidad o deshonestidad contra las autoridades.
- Falta de disciplina e incapacidad para seguir reglas.
- Realizar actos de vandalismo o destrucción de propiedad privada.
- Intolerancia a diferencias con otras personas, excesos de prejuicios.
- Abuso de drogas o alcohol.
La mayoría de los actos de violencia son cometidos por personas que presentan afectaciones en su bienestar mental como pensamientos negativos, manejo de la ira y otras habilidades sociales y emocionales.
