Una de las principales causas por las que los pacientes acuden al médico es para tratar enfermedades gastrointestinales. Entre éstas, las enfermedades anorectales ocupan el segundo lugar en consulta. Debido a que estos padecimientos son por lo general engañosos al inicio y evolucionan con lentitud, es común que se acuda al médico cuando ya la enfermedad ha avanzado.
Saber de qué se trata, cuáles son los síntomas y cómo tratarlos nos ayudará a manejar mejor enfermedades que pueden llegar a ser muy molestas y dolorosas, como las hemorroides.
¿Qué son las Hemorroides?
El tejido hemorroidal es un grupo de venas que se agrupan en paquetes y se encuentran dentro del extremo del recto. Su función es proteger los músculos durante la defecación y permitir el cierre completo del ano durante el reposo.
El origen de la enfermedad hemorroidal se relaciona con llenado sanguíneo de estos paquetes venosos que se dilatan, estiran y erosionan provocando sangrado y dolor. Sucede como consecuencia del estreñimiento, el esfuerzo prolongado y aumento de la presión dentro del abdomen.
¿Cuáles son los Síntomas?
Los síntomas que se presentan son:
- Sangrado, que puede ser desde goteo en el papel higiénico hasta un sangrado intenso que se aprecia en el sanitario.
- Salida de material mucoso.
- Sensación de plenitud anal, una sensación de algo que ocupa espacio e incómoda.
- Dolor anal.
- La presencia de una tumoración o hinchazón dolorosa en el ano con cambio de color o sangrado.
Tratamiento
El tratamiento de las hemorroides depende del tamaño y síntomas. En las hemorroides de menor grado el médico podrá recomendar cambios en los hábitos alimenticios. Se puede corregir el estreñimiento añadiendo fibra a la dieta con frutas, verduras, pan integral y tomando muchos líquidos. También se recomienda evitar las comidas muy sazonadas y el consumo de alcohol.
Es importante evitar esfuerzos al defecar y no sentarse mucho tiempo en el sanitario, utilizar papel higiénico suave o la limpieza anal con un baño de agua tibia.
Si las hemorroides no mejoran con este tratamiento o son de mayor grado, es posible que se requiera cirugía para eliminarlas.
Fuente: Dr. Julio C. Cortinas Gonzalez. Cirujano General, Vascular, Laparoscopia y Cirugía de Obesidad.